EL JAMON DE PATA NEGRA:
UNA DELICIA O SIMPLEMENTE CARNE CRUDA
Hace muchos años, invité a comer a un señor norteamericano en un bar de Madrid donde servían un portentoso jamón de pata negra, mi invitado se negó a comerlo con el comentario de que aquello era carne cruda y pidió otra cosa. El jamón es carne cruda para quienes no lo han comido nunca, no podemos pretender que quien no lo ha visto en su vida se sienta atraído por un jamón de pata negra, hará falta primero que lo conozca y dejar que lo saboree poco a poco, a ver si le gusta, y si así ocurre, lo cual es muy probable, luego podremos invitarle, pero si ello no se produce, entonces será mejor olvidarse del jamón y dejarlo a su aire porque a la fuerza no se invita a nadie.
El ejemplo podría aplicarse a la política que se sigue con algunos países, y muy especialmente los que están en la mente de todos, Irak y Afganistán, hace unos años y ahora con Túnez, Egipto, Libia y Yemen, países en los que existen revueltas populares contra sus lideres, básicamente por el deterioro de su calidad de vida debido a la subida del precio de los alimentos, no han tenido democracia jamás y ahora unos países y medios de comunicación occidentales interpretan esos movimientos como el deseo del Pueblo para acceder a un sistema democrático.
Sobre la intervención militar en Irak, los resultados están a la vista, han acabado con un régimen tiránico a cambio de una anarquía sin visos de solución que a buen seguro acabará en un régimen de corte islámico en cuanto se marchen los norteamericanos, en un país, donde a pesar de las graves deficiencias en derechos humanos, iban por delante de otros de la zona; las mujeres, por ejemplo no sufrían la discriminación típica de los países islámicos, y la religión estaba en su sitio, en las mezquitas y madrazas.
Ahora toca a Libia, país donde quizás menos haya importado la cuestión alimenticia, las declaraciones de Obama, la Sra. Clinton y algunos lideres europeos, apoyando a la oposición del coronel Gadafi, han dado alas a un grupo de rebeldes que en este caso no han contado con la pasividad del ejército y a los que ahora están masacrando, todos los medios hablan de una oposición democrática pero nadie dice quiénes son, lo cierto es que son una alternativa al régimen de Gadafi, ¿pero de que clase?, ¿estamos apoyando una revolución para una mejora social, o simplemente una vuelta de tortilla, un cambio de la tribu en el poder?, porque lo de la voluntad democrática del pueblo es difícilmente creíble para quienes no saben lo que es.
En el caso de que los líderes de los rebeldes tengan intenciones democráticas, lo cual nadie puede asegurar, no basta con las buenas voluntades, se necesita una población con la suficiente cultura que no se deje embaucar por los políticos, que nos engañan hasta a nosotros, ni convencer por lo eterno. No hay democracia sin pan, http://nosonbromas.blogspot.com/2011/02/egipto-pan-o-democracia-esta-pasada.html pero tampoco sin cultura, las democracias a cañonazos no funcionan y mientras tanto ahí estamos con cuatro aviones y un submarino, intentando ganar la democracia libia; ya veremos, ya hemos visto la nueva de Irak.
Los políticos no aprenden, cuando ya saben, se retiran y después mueren y llegan otros ignorantes, por ello, la historia siempre se repite.
No es broma
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