miércoles, 29 de octubre de 2014



¿NOS LO MERECEMOS?

Hemos visto como durante los últimos años, tanto el gobierno como los partidos de la oposición, e incluso los sindicatos, han venido hablando, unos con un fin y otros con otro, de la crisis financiera refiriéndose a “los bancos”. Ello constituye, no ya solo una injusticia, puesto que la crisis financiera de España no se debía a los bancos, sino a las cajas de ahorro, sino también un atentado a nuestra propia economía, puesto que nuestros principales bancos, especialmente Bilbao y Santander, no son solo bancos españoles, sino bancos a nivel global, cuya reputación nos afecta a todos pues sus beneficios pagan impuestos en España.

¿Es normal, que nuestro gobierno, en defensa de nuestros intereses, no se haya ocupado de aclarar ante la opinión pública y ante el mundo financiero internacional, que el gran agujero del sistema crediticio español era de las cajas de ahorro, y que los bancos propiamente dichos gozaban de buena salud?.

¿Es normal que los partidos de la oposición, que también se supone abogan por el interés general, no le reclamasen al gobierno que así lo hiciera?, y ¿los sindicatos?, porque los sindicatos, como todos los que tienen los pies en la política, también han estado echándole la culpa a “los bancos” de detraer fondos públicos para su salvación, en detrimento de los trabajadores.

Pero no, no se trataba de un mero error semántico, sino de una actitud calculada para que la crisis financiera fuera percibida en su conjunto ya que no podían permitirse el lujo de que dicha crisis se centrase únicamente en las cajas de ahorro, porque resulta que a las cajas de ahorro las han arruinado los partidos políticos y los sindicatos con la estimable cooperación de las asociaciones empresariales.

La gente empieza a percibir, con considerable retraso, que el dinero que esas mafias dilapidan es su propio dinero, el casi 70% que los españoles pagamos de impuestos sobre nuestros ingresos y que ahora necesitamos mas que nunca dada la situación. Por ello, a muchos se les revuelven las tripas de rabia, con razón, al ver que una cuadrilla de espabilados junto con unos ineptos, algunos casi analfabetos, pretenden estar en la junta directiva de unas cajas de ahorros, antaño modélicas, tan solo para cobrar sueldos y dietas por no hacer nada, y gastarse alegremente el dinero mediante unas tarjetas de crédito, llamadas “black” que se cargan directamente en la cuenta de fallidos o de errores informáticos.

Pero aunque lo mencionado anteriormente sea el ejemplo negativo por excelencia, ello no deja de ser como se le atribuye al camarada Blesa “el chocolate del loro”, y si no al tiempo, porque una vez encontrada una punta de la madeja, y puestos a tirar, van a salir las cosas mas gordas, los créditos sin garantías, algunos de hecho, a fondo perdido, que estas lumbreras partidistas y sindicales  con las patronales (para que no se diga), han concedido, o permitido que se concedieran a parientes, amiguetes y clientes políticos, por valor, de momento, oficialmente, en mas de cuarenta mil millones (a kilo por millón, dos camiones de ocho ejes, a tope de carga) que vamos a tener que pagar entre todos.

¡Que basura de clase política! casi me alegro de lo de Podemos, si no fuera porque son quienes son….¡que pena! que la posible medicina parezca tan mala como la enfermedad.

¿De verdad tenemos los políticos que nos merecemos?, entonces es que somos muy malos. O muy tontos, a elegir.

No es broma

viernes, 17 de octubre de 2014

Del complejo de superioridad al síndrome de Estocolmo


“oiga yo con mi exesposa no la odio ni tengo resentimiento, solo que no quiero vivir mas con ella. si ella respeta eso, le deseo lo mejor de lo mejor. Pues es parecido. les aseguro que no es odio. Mi familia procede de extremadura, yo naci alla, pero no quiero vivir mas con ustedes Si respetan nuestra decision (para ello empiecen por respetar que votemos) les aseguro que les deseo lo mejor de lo mejor.”

El comentario lo he sacado de El Mundo, cortado y pegado, no he tocado ni una coma, el comentarista, paladín de la independencia de Cataluña, estaba inmerso en un cruce de comentarios de un artículo de los muchos que ya nos vienen aburriendo, sobre  Cataluña y el independentismo. He creído que era un comentario que describe el perfil del independentista inducido, una variedad mixta entre el síndrome de Estocolmo y  víctima de la LOGSE, por profesores y maestros que a su vez ya son también  frutos de la LOGSE.

Deduzco que es una victima de la LOGSE por las faltas de ortografía y de sintaxis, puesto que con el sistema educativo anterior, seguramente no habría pasado de 3º de EGB, y tiene el síndrome de Estocolmo, porque el complejo de este nombre se refiere a aquellos que salen en defensa de sus maltratadotes, no lo explico para quienes no lo saben, porque pueden salirse de mi artículo un momento y verlo en Google o cualquier otro buscador.

El nacionalismo es el complejo de superioridad de los ignorantes, recuerdo en mi niñez, que llegaban a nuestras islas cantidad de inmigrantes de la península, como es natural, provenían de las capas mas desfavorecidas de las provincias con menor nivel, eran pobres de medios y estaban pobremente alfabetizados, los que lo estaban, por lo cual, nos traían el mensaje erróneo de que fuera de las islas, el resto de los españoles eran todos como ellos, o sea, los mas ignorantes de aquí, pensaban que eran superiores a todos los de la península.

En la escuela, el tener un nombre no mallorquín, equivalía a pobreza e incultura y los niños de aquí, no querían relacionarse con los de fuera, a los que por entonces se llamaban “foràsters” o peor aún, “murcians”. Los pobres niños discriminados, en su afán de querer ser como los demás, en muchos casos renegaban a su vez de aquellos mas recientemente llegados, que todavía no habían aprendido la lengua, para que no se les confundiera con ellos, intentando igualarse por arriba.

Esto es pues, lo que es el nacionalismo catalán, unos señores que se creen superiores a los demás, especialmente los mas incultos: los de las comarcas mas rurales y las capas mas bajas, unos hijos de inmigrantes de segunda generación, que vieron como se discriminaba socialmente a sus padres y a ellos mismos y que sufren el síndrome de Estocolmo, adoctrinados o que creen que fuera de España serían ricos.y una clase política de espabilados a los que se les hace la boca agua pensando en ser jefe de estado o ministro, revistando guardias de honor en paises extranjeros.

Veamos, los de CiU y ER, tienen mayoritariamente apellidos catalanes: Junqueras, Forcadell, Homs, Mas, Bosch, Rovira, etc. esos son los "espabilados" y los independentistas con complejo de superioridad.

Los de Izquierda Unida , PSC, y la CUP, hijos de inmigrantes, tienen mayoritariamente apellidos castellanos: Herrera, Coscubiela, Navarro, Iceta etc. eso si, todos con su nombre de pila traducido al catalán, esos son los del síndrome de Estocolmo, los tontos útiles.

Luego están los que escriben comentarios como el del encabezamiento, los ignorantes profundos, adoctrinados en la escuela por otros ignorantes.

Este artículo nada tiene de científico, pero es una caricatura inconfundible del independentismo catalán. Ya lo dijo alguien: el nacionalismo se cura viajando.

No es broma

jueves, 2 de octubre de 2014

HIPOCRITAS


Dicen que se coge antes a un mentiroso que a un cojo. Yo extendería el dicho a los hipócritas, porque en realidad no son mas que mentirosos cualificados, mentirosos de grado superior, caraduras.

No sorprende pues que los mayores hipócritas sean los partidos políticos, y por supuesto que me refiero a los dirigentes, esos que viven de la política, o sea del erario público, por una parte, y por la otra de lo que puedan afanar.


Así pues, hemos tenido que aguantar durante unos años, que nos hablasen de la crisis bancaria, una gran mentira, porque en España no ha habido crisis bancaria, sino crisis de las cajas de ahorros, entidades crediticias sin afán de lucro, de largo y eficiente recorrido en la historia de España hasta que se metieron dentro de sus juntas rectoras los partidos políticos y los sindicatos (los de clase y los empresariales).


La razón de referirse a los bancos, aun a costa de perjudicar internacionalmente a los bancos sanos, es obvia, mejor que le echen la culpa a Botín del mal estado de las finanzas españolas, que a las cajas por separado, para que no se sepa que los responsables del desaguisado son los propios políticos y los sindicatos.


Hasta aquí una mentira que al final se cayó por su propio peso pues todo el mundo sabe ya la verdad, ahora viene la hipocresía:


Todos esos partidos que practican la demagogia de que si hay dinero para los bancos pero no para el pueblo, que si se hacen recortes por una parte y se pagan las deudas de los bancos, todo ese discurso facilón, y ahora resulta que no solo fueron los demagogos quienes hundieron a las cajas, con préstamos políticos y a amiguetes, sueldos enormes, dietas por no hacer nada, y gastos de representación, sino que además tenían una tarjeta secreta mediante la cual gastaban lo que querían en temas personales, sin liquidar ni justificar nada: mas de 15 millones de euros solo en Caja Madrid en 9 años.


Que cara mas dura, ¿se puede ser mas hipócrita?, camarada Cayo, camarada Gaspar… compañeros Cándido y Toxo, y otros muchos de cuyos nombres no me acuerdo por no ser tan insistentes, pero que de todos formas son demasiados para ponerlos en este artículo. Los de la derecha no dijeron nada por ser ellos quienes dieron el préstamo a los bancos.


Como campa libremente la caradura por España...


No es broma