martes, 23 de febrero de 2010

DOCE  PERSONAS SIN VERGÜENZA

El PP presentó el primer recurso de inconstitucionalidad contra el Estatut de Cataluña el 31 de julio de 2006, y el Tribunal Constitucional lo admitió a trámite el 28 de septiembre de aquel año, llevamos pues  tres años y cinco meses sin una resolución sobre un  tema, que lejos de haberse retrasado, debería haberse resuelto con urgencia dada la tremenda importancia de las cuestiones que en el mismo se planteaban, algunas de ellas relativas incluso a la unidad del Estado.
Aparte del recurso del PP, hay hasta 6 recursos más sobre el mismo Estatut presentados por el Defensor del Pueblo y las CCAA. No se trata de un problema de trabajo acumulado, pues se supera en mucho el tiempo medio de resolución de los casos, se trata únicamente de que al deber los magistrados su puesto a distintos partidos, temen que su resolución pueda ofender a sus patronos, los partidos, a los que deben su cargo.
Hay que comprenderlos, pues no están allí en base a su saber constitucional o a su prestigio, y por supuesto, tampoco por su integridad, sino porque los partidos los eligen de entre los mas dóciles de sus correligionarios para que no resuelvan nada en contra de sus intereses, como está pasando ahora; no resuelven el caso porque no saben como presentarse ante sus amos y decirles que el Estatut no respeta la Constitución vigente.
La situación correcta ante dicho conflicto moral, sería la dimisión, pero como ya hemos dicho antes, la integridad no es lo que ha determinado su nombramiento y tienen que quedarse para luchar a favor de sus amos, los partidos políticos.
Y es que en esta nuestra “democracia de partidos” en la que los partidos son pequeños reinos absolutistas que ya lo controlan todo menos el futbol, que es sagrado, ya se da la paradoja del “Quis custodiet ipsos custodes”, o sea, “quien vigila a los vigilantes” de Platón en “La República”, el Tribunal Constitucional de fábula: poner al zorro a guardar a las gallinas.
Hemos pasado de los“Doce Hombres sin Piedad” de Hollywood a los “Doce Personas sin Vergüenza” de España. ¡Que país madre!, Antonio Pizá dixit.
No es broma

miércoles, 17 de febrero de 2010

PRIETAS LAS FILAS

El marketing partidista nos vende de continuo las virtudes del “cierre de filas”, consistente en defender a fuego y espada a los correligionarios, así, cuando un destacado político fracasa estrepitosamente en las funciones que tiene asignadas y los medios comienzan a señalarle con el dedo, o se perciben rumores de desaprobación en las bases de un partido, la respuesta invariable, lejos de cualquier medida para solventar el problema, consiste en celebrar una reunión cuyo obvio resultado es el apoyo unánime al cuestionado. Cuanto más alto sea el rango del político incompetente, mas apoyo más prietas se cierran las filas.

Por otra parte, esto no puede sorprender a nadie, es algo completamente congruente con  la esterilidad de la maquinaria partidista y nos recuerda aquella conversación entre ratones asustados por la eficacia del nuevo gato, en la que  estando de acuerdo en que la mejor medida a tomar era ponerle un cascabel, al final se quedó en nada, por aquello de ¿quién pone el cascabel al gato?. Pues si, ¿quien se atreve en una reunión de la ejecutiva o de cualquier órgano de partido, a levantarse y decirle a Zapatero que se vaya para que no siga perjudicando a España con su incompetencia?, o a Rajoy ¿se atreve alguien a decirle que convoque un congreso para que se vote libre y democráticamente a un líder adecuado que ejerza la oposición y cambie la imagen del partido?, ¡no nadie!, todos lo piensan, pero…¿quién pone el cascabel al gato?, se están jugando el sustento, podrían ofender al cuestionado y caer en desgracia.

En resumen, los partidos tal como están en España, son la desgracia nacional, organizaciones cuya estructura se asemeja a la de algunas organizaciones delictivas en las que nadie cuestiona el liderazgo por miedo, con la diferencia, de que en esas por lo menos, todo el mundo sabe de que va la cosa y no se engaña a nadie, no andan por ahí hablando de democracia y presumiendo de lo que en realidad no les interesa, el interés general.

Propongo que se instaure un himno común para los partidos políticos españoles, y sugiero la canción: “Prietas las Filas”recias marciales.

NO ES BROMA

lunes, 8 de febrero de 2010

LA CLASE POLITICA

En la CAIB, mi comunidad, la policía ha hecho una redada con el resultado de 15 detenciones, no ha sido en el barrio chino como antaño, se trata de una redada de políticos corruptos que es lo que abunda ahora y creanme, les aconsejo que si tienen que visitar la sede de presidencia, consellerias, parlament etc. procuren llevar el DNI, no vaya a ser, que en una posible redada, le confundan con un político y tengan que pasar unas horas en comisaría hasta que consigan identificarse.

Se trata sin duda alguna de politiquillos con escasa habilidad, de los que cogen el dinero de la caja y dejan un papel a modo de vale para que se les pueda pillar, porque a los que se molestan en trincar con un poco de cabeza e ingeniería legal, no los pillan nunca, mira que hay agujeros en la legislación y todavía hay quien va con el saco, como Atila o Francisco Drake.

Ocurre lo que  antaño con los médicos pero a sensu contrario, la mayoría procedía de familias acomodadas y practicaban la medicina de forma casi desinteresada, pues lo que les motivaba, era el curar a la gente, y se sentían bien por ello cuando lo conseguían. Pensemos en lo que se llama “clase política”, gente que se dedica a la política como profesión, como medio de vida o sea, con ánimo de lucro, no están ahí para servir, sino para servirse, por lo tanto lo que prima son sus intereses, tienen que aprovechar su estancia en el Poder pues de lo contrario quizás nunca mas tengan otra oportunidad, y de ahí estos resultados. Los mas honrados, o sea, los que buscan el Poder tan solo por mandar, no pueden corregir situaciones de corrupción, por alianzas políticas que les proporcionan el cargo que ostentan, y lo que es peor, no pueden dimitir porque se deben a un partido del que se nutre una enorme clientela a base de cargos, carguillos, asesorías, enchufes y otras prebendas y sobre todo, porque el fin de su vida política conlleva el fin de sus ingresos; el pan nuestro de cada día que rezábamos de pequeños.

Por eso, si bien los partidos políticos están legitimados por el Artículo 6 de la Constitución, ¿porque tiene que ser esta la única manera facticamente posible de acceder a los cargos políticos?, ¿no garantiza la Constitución el derecho individual a la participación en los asuntos públicos (art. 23)?, ¿no hay en la misma un mandato expreso a los poderes públicos para que promuevan las condiciones para ello (art. 9.2)?. ¿Por qué tenemos que aguantar la exclusividad de unos partidos formados por “científicos de la política”, o sea, profesionales de la intriga, del lavado de cerebro a los que no leen, del fraude de ley y del robo con escalada?, ¿porqué no pueden haber listas abiertas sin partido en las que cualquiera  pueda inscribir su nombre, dando oportunidad a personas que ya han demostrado su valía en la vida y que tan solo busquen la satisfacción de servir, como los médicos de antes?.

Algunos partidos lo van a proponer en su programa algún día, ¿Cuándo?: cuando los cerdos vuelen, como dijo J.Benjamín Toshak… y lo despidieron del Real Madrid.

NO ES BROMA