NO ES BROMA

LOS NUEVOS SINDICATOS VERTICALES

Durante el régimen anterior, existía en España la Organización Sindical, los llamados sindicatos verticales, en su seno y bajo la tutela del Estado se agrupaban patronos y trabajadores, en sus últimos años, CCOO consiguió infiltrarse en el sistema y realizo una labor bastante positiva apoyando a los trabajadores que acudían a dicha organización en busca de asesoramiento y ayuda legal, eran competentes porque al no poder actuar abiertamente en nombre de su mentor: el PCE, no hacían política y se limitaban a actuar como un simple sindicato.

Hoy se supone tenemos sindicatos libres, aunque la triste realidad es que los principales, los que se atribuyen la representación del 80% de los trabajadores, UGT y CCOO, llegaron con los partidos políticos a los que pertenecían: PSOE y PCE respectivamente, solo trajeron sus siglas y sus dirigentes, es decir, se formaron desde arriba hacia abajo, son pues sindicatos verticales (como antes) ya que fueron creados por partidos políticos y no por los trabajadores especialmente UGT, que al venir del exilio, no traía afiliado alguno mas que a sus dirigentes y cuya afiliación, traía aneja la del PSOE., como ya hemos dicho en el párrafo anterior, CCOO estuvo durante un tiempo infiltrada en los sindicatos del Movimiento.

Apenas tienen afiliados (menos del 20%) y viven casi exclusivamente del Estado, percibiendo del Ministerio de Trabajo unos 21 millones de Euros por diferentes conceptos  y unos 173 millones en concepto de “formación”, esta es la financiación conocida, luego viene una trama de subvenciones y pagos en especie que todas las administraciones y otras instituciones pagan, esta es la financiación desconocida.

Su democracia interna es parecida a la de los partidos políticos, o sea inexistente y las elecciones sindicales, las controlan ellos mismos, o lo que es lo mismo, no las controla nadie

Hasta aquí, digamos que no pasa nada, estamos en la sintonía de este nuestro país con democracia de partidos, o sea de tercera división y estos sindicatos aunque verticales prestan un servicio a los trabajadores, que aunque deficiente proporciona por lo menos una aparente representación, que permite la celebración de convenios y negociaciones con la patronal CEOE, otra organización de representación deficiente pues en realidad representa, tan solo, a los grandes empresarios.

Luego vienen sus “actividades sindicales”: el pasado mes de Diciembre, celebraron un acto de protesta bajo el lema “Que no se aprovechen de la crisis” en referencia a los empresarios, aun a sabiendas que la presente crisis ha destruido ya en España a 127.000 empresas, mientras que más del 80 por ciento de las pymes que quedan vivas están asfixiadas y en peligro de quiebra. Hace unos días, promovieron una serie de manifestaciones en toda España, pidiendo nada menos, que se exonerase al juez Garzón del cumplimiento de la Ley y que no se permitiese la personación en los procesos judiciales a las personas y grupos de determinada orientación política, se atacó al Tribunal Supremo y se vertieron insultos a determinados magistrados del mismo en presencia de miembros del Gobierno, todo ello con el dinero de todos los españoles.

Estas son nuestras fuerzas sociales, las que negocian nuestra futura normativa laboral con el Estado y a favor de las cuales el Gobierno hace dejación de su función de gobernar mientras el barro, por no decir otra cosa, nos llega ya al cuello y el número de parados excede con holgura los 4 millones.

¡Que país, madre!

No es broma