LIBERTICIDAS
Tengo una foto con mi padre y mi abuelo en los tendidos de la plaza de toros de mi pueblo en una de las corridas tradicionales de cada año por fiestas, es una foto muy querida por mi, es además un recuerdo de una de las dos o tres corridas que he presenciado en mi vida. Definitivamente, no me gustan los toros, tampoco el boxeo, ni las peleas de gallos, nada que implique un mínimo de crueldad.
Dicho esto, presencio con estupor, como un grupo de políticos catalanes, bien y mal intencionados, suprimen de un plumazo en aquella autonomía, los derechos de a quienes si les gustan los toros, espectáculo tradicional de nuestro país, arrogándose la defensa de los “derechos de los animales”. Supongo que a continuación van a promover una ley prohibiendo el consumo de carne por la crueldad cientos de veces superior a la fiesta taurina, que ello implica, y a la que dediqué un escrito hace algún tiempo, por eso, y por el hecho de que hay muchísimas páginas en la red que de ello se ocupan no voy a volver sobre el tema.
Y es que ya no se trata de los toros, ni de las verdaderas razones de la prohibición, se trata de esta manía enfermiza de los socialistas de todo el mundo de prohibir, y del PSOE de copiarlo, de no poder dejar al pueblo que decida y que haga lo que quiera siempre que no invada los derechos de los demás, quien quiera fumar que fume, quien quiera prostituirse que se prostituya, si le gustan los bollos y las chucherias que las coman y si quieren morirse que se mueran, aunque esto último no lo van a prohibir.
Las normas son un freno a la libertad que solo se justifican por la defensa de los derechos de los demás, la libertad descansa en la autonomía de la voluntad con respeto, el prohibir sin defender un bien jurídico, es la pataleta de quienes fracasan en convencer, imponen sus propias ideas o principios mediante la coacción del Estado, con la excusa de proteger a quien puede hacerlo por si mismo, imponen o impiden una determinada conducta a quien debiera ser libre para hacer lo que le venga en gana, aunque le perjudique. Si piensan que algo no es bueno para alguien, que le convenzan, para ello están las escuelas, publicas o privadas tuteladas por el Gobierno y todos los medios de comunicación.
Me recuerda a un viejo conocido, socialista que renegaba del régimen anterior y que siempre decía…” ¡socialisme es llibertat!”, ¿la libertad por la prohibición?, que decepción….
Dicen que van a prohibir las hamburguesas grandes porque crean niños obesos, no se rían, porque ya lo están intentando en otros sitios, y…
No es broma
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