DEMOCRACIA DE MILITANCIAS
Vamos mejorando nuestra democracia, vamos dejando de ser democracia de partidos para poco a poco convertirnos en democracia de militancias, o sea la partitocracia en versión 1.2 para expresarlo en forma digital.
O sea, que ahora el 50% del voto electoral está en manos de lo mas extremista y lo mas interesado de cada partido, pues está claro que quien se apunta a un partido, es por lo general quien quiere meterse en política o alguien radical en cuanto al ideario del partido, gente anclada en el pasado.
Da vergüenza ver a los dirigentes de los partidos con la boca llena de democracia, escupiendo cada dos por tres que en su partido “quien decide es la militancia”, y cabría contestar que “que pasa con los que no somos militancia”, porque al final, cuando votemos solo ratificaremos a alguno de los que ya ha elegido la “militancia”.
Parece fuera mejor el sistema digital y que los candidatos sigan siendo digitalizados por los propios partidos, pues cabía esperar, aunque no mucho, que quien es nombrado a dedo, lo sea por sus meritos, entre los cuales debía encontrarse el conocimiento mínimo y la capacidad de lidiar con los problemas de España.
Así que paso a paso vamos progresando, hemos pasado de la democracia orgánica, a la democracia de partidos, modificada ahora como democracia de militancias, aunque afortunadamente también tenemos ya en la recámara otro gran sistema que es la democracia popular versión 1.3 (la 1.2 es la de Venezuela ), de los antiguos países comunistas europeos, que aunque ya extinguida en Europa, parece ser se está promocionando desde el Palacio Vistalegre de Madrid.
En fin, con lo sencillo que sería una democracia sin adjetivos, una democracia a secas, en que quien quisiese, se presentase a las elecciones sin tener que apuntarse a ningún partido, ni formar parte de ninguna militancia.
Pero claro, con el sistema actual, quien tendría que arreglar esa carencia democrática y a mi modo de ver inconstitucional, tendrían que ser los propios partidos, los que monopolizan el Poder, y el Poder aunque sea por razones de democracia, es muy difícil de soltar.
No es broma
2 comentarios:
Tienes toda la razón
Sin embargo, hay un pero: Los militantes tienen que pagar unas cuotas, y al igual que en las empresas, tienen derecho a votar (igual que en una JGA se puede proponer el cese del Cjo de Administración)...
Otra cosa muy distinta es lo que hace mucha gente: Como la militancia está a mi favor, defiendo el voto de la militancia; cuando a mi no me interesa, hago lo que me da la gana y me paso la militancia por el forro (Caso Pedro Sánchez cuando destituyó a toda la cúpula del PSM sin tener en cuenta lo que decía la militancia, que por aquel entonces no le importaba).
Lo de Podemos es un partido ya con fecha de caducidad. Y no hay más que ver la gente que fue a Vistalegre: hace 3 años lo petaba, ahora no llena ni la mitad del aforo...
Luego está el PP con sus dedazos (del cual no dices gran cosa), guerras internas y corruptelas (lo del ministro de justicia con el presidente de Murcia es para hacérselo mirar).
Luego tenemos a UPyD: que destapó el escándalo de Bankia y todo lo relacionado con su salida a Bolsa y preferentes. Como es un partido incómodo, nos lo cargamos y punto...
En fin, que es una pena,
Y así nos va,
JIV
Bueno, los militantes pagan una cuota, en el PSOE por ejemplo, es de 3€ al mes, y estudiantes, desempleados y jubilados abonan media cuota, además, si no pagas, en principio no te dan de baja. Sin embargo, esta no es la cuestión, la cuestión es que nadie puede tener más derecho que otro a la participación electoral, por pagar una cuota. No estamos en un consejo de administración cuyo procedimiento electoral está regulado por sus propios estatutos privados, o en último caso por el Codigo Mercantil, sino en el ejercicio de un derecho constitucional que es el que todos tenemos derecho a participar.
Nada he dicho del PP, con el dedo (aunque parece que ahora van a implementar una solución militantes/congreso), porque para mi, las primarias solo serían aceptables si pudieran votar en primarias todos los ciudadanos, como por ejemplo en los EEUU (con todas sus imperfecciones).
Pero el quid de la cuestión, es que no puede haber una democracia en su máxima amplitud, mientras los partidos tengan la exclusiva de la participación electoral, sin que se permita que un individuo, con ganas de hacer algo por su país, o por las razones que sean, pueda presentarse fuera de cualquier lista de candidatos.
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