NO ES BROMA

 URGENTE: CAMBIAR EL SISTEMA ELECTORAL

POR JUSTICIA Y POR LA NACION ESPAÑOLA

Cualquiera que lea periódicos digitales, habrá podido observar como una gran mayoría de ciudadanos deja comentarios relativos a la LOREG (Ley Orgánica de Régimen Electoral General), todos son negativos incluso los de los que los hacen sin conocimiento de la misma. Se podría decir que la gente está tomando conciencia de las imperfecciones que dicha ley acarrea a nuestra democracia, y clama por la reforma del sistema electoral.

Y es que una ley no puede ser justa cuando por su aplicación, un partido nacionalista como CiU con 1.014.263 votos,  obtiene 16 diputados mientras que un partido como UPyD obtiene solo 5 diputados con mas votos: 1.140.242, y tiene incluso que recurrir a prestamos de diputados para obtener grupo parlamentario propio.

En resumen, que unos partidos que solo representan el 1% del voto nacional resultan clave para la gobernabilidad con graves consecuencias, pues dada la falta de verdaderos hombres de Estado y el afán de gobernar a cualquier precio de unos partidos que se aferran al poder sin escrúpulos, llevan a éstos a  pactar con los nacionalistas, cuando no tienen mayoría suficiente, porque los necesitan y a tolerar sus derivas independistas, cuando no los necesitan, por si acaso los fueran a necesitar en las próximas. Esta  dependencia ocasiona, además de  concesiones económicas desorbitadas, concesiones políticas, y tolerancias inconstitucionales, que atentan contra la unidad de España como nación, hasta el punto que ya se oyen, cada vez más fuerte, voces secesionistas.

Una reforma a fondo del sistema electoral, implicaría un cambio en la Constitución, o sea una mayoría de tres quintos de cada una de las cámaras, se necesitaría un pacto entre el PSOE y el PP, lo cual no parece probable. ya que estos dos son los partidos más beneficiados por la LOREG pues son los que mas escaños obtienen con menos votos.

Pero una reforma menor, si podría hacerse, incluso con minoría simple, puesto que se podría cambiar el número de miembros del Congreso desde 350 a 400 escaños, respetando incluso la Regla D’Hondt que inspira la LOREG, ello potenciaría la presencia de partidos medianos en el hemiciclo y proporcionaría, además de mas justicia para estos, una representación adecuada para ser partidos bisagra, terminando con esta función exclusiva y nefasta de los partidos nacionalistas.

Pero no nos hagamos ilusiones, el PP en el poder ha empezado la legislatura con el complejo de la soledad y se dedica ahora a cortejar a CiU en busca de apoyos que no necesita, con riesgo incluso de no poder atender algunas de las promesas que hizo sobre el derecho a una educación en la lengua oficial del Estado.

La reforma es urgente, pero esto no va a suceder… al menos con estos partidos de mercaderes políticos. No cuenta lo que conviene a España, cuenta lo que les conviene a ellos, sus garbanzos.

No es broma